La capilla de la Casa Santa Marta albergó ayer, miércoles 14 de septiembre, la Santa Misa en recuerdo del P. Jacques Hamel, el sacerdote francés asesinado el pasado 26 de julio por dos jóvenes yihadistas mientras celebrara Misa. En la homilía, el Papa Francisco afirmó que el presbítero ha muerto mártir, y dijo con fuerza que “¡matar en nombre de Dios es satánico!”.
El sacerdote “forma parte de esta cadena de mártires”. “Los cristianos que hoy sufren por no renegar de Jesús hacen ver la crueldad de esta persecución. Y esta crueldad que pide la apostasía –digamos la palabra– es satánica”.
“¡Qué bueno sería que todas las confesiones religiosas dijeran: ‘Matar en nombre de Dios es satánico’!”, añadió.
A la celebración asistió la hermana del sacerdote, así como 80 fieles de la diócesis de Rouen –a la que pertenecía la víctima– junto a su obispo, Mons. Dominique Lebrun. Fue una celebración emotiva, en la que el Papa mandó colocar en el altar una fotografía del sacerdote asesinado.
“En la cruz de Jesucristo –hoy la Iglesia celebra la fiesta de la Cruz– entendemos plenamente el misterio de Cristo, este misterio de aniquilación, de cercanía a nosotros”, dijo Francisco en la homilía.
“Este es un misterio que se hace martirio para la salvación de los hombres. Jesucristo, el primer mártir, el primero que da la vida por nosotros”.
El Pontífice explicó que “de este misterio de Cristo comienza toda la historia del martirio cristiano, desde los primeros siglos a nuestros días. Los primeros cristianos han hecho confesión de Jesucristo pagando con su vida. A los primeros cristianos era propuesta la apostasía, es decir, ‘Digan que nuestro Dios es el verdadero, no el vuestro. Hagan un sacrificio a nuestro dios o a nuestros dioses’, y cuando no hacían esto, cuando rechazaban la apostasía eran asesinados”.
“Esta historia se repite hasta hoy, y hoy en la Iglesia hay más mártires cristianos que en los primeros tiempos. Hoy hay cristianos que son asesinados, torturados, encarcelados, degollados porque no reniegan de Jesucristo”.
“Esta historia se repite hasta hoy, y hoy en la Iglesia hay más mártires cristianos que en los primeros tiempos. Hoy hay cristianos que son asesinados, torturados, encarcelados, degollados porque no reniegan de Jesucristo”.